Cuando era niña, y tomaba mate, me imaginaba que las burbujitas de colores eran las salitas del jardín, y que yo las hacía volar...
La última que tenía que explotar era la naranja, porque era la mía. Y a la que más odiaba era a sala rosa.
SeGuImE
lunes, 22 de noviembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario